Resumen
Este trabajo pretende entramar algunas reflexiones sobre la lengua inclusiva y la literatura argentina (urbana) del siglo XXI. La lengua –“la palabra (la palabra autorizada) todavía es mayoritariamente de los hombres”–1 y la literatura son instituciones patriarcales, condición que en la Argentina comienza a ponerse en tela de juicio. La hipótesis que me gustaría probar aquí es que la lengua y literatura empezaron a despatriarcalizarse a partir de las conmociones sociales (culturales: en sentido amplio) visibilizadas por un movimiento feminista plural, colectivo de protesta: Ni una menos. Para entramar una reflexión sobre la lengua inclusiva –elemento cultural sobre el cual no hay acuerdo en el universo hispanohablante– y mostrar cómo se expresa un sector de la literatura argentina del siglo XXI (escrita por mujeres), haré pie en tres categorías reflexivas: emancipación, patriarcado y feminismo(s). Luego trataré de entrar en los pliegues de la lengua inclusiva y a manera de conclusión propondremos propondré una cita de una novela de Ana Ojeda (Buenos Aires, 1979), Vikinga Bonsái.